Entrenar con una sonrisa es posible
Una amiga me dijo: ¡Ven y prueba! Y repetí. Ejercicios que se adaptan a tu nivel, con gente muy maja y positiva, que te anima a superarte. ¡Y al aire libre! En pocos meses me siento genial, he aprendido sobre técnica y a evitar lesiones. «¡Vamos Ari!» se ha convertido en mi emblema. Solo puedo decir ¡¡¡Gracias!!!! Porque Grasshopper es un estilo de vida. Go!!!